martes, 20 de noviembre de 2012



Y como en un sueño o mejor dicho como una pesadilla, me encontraba todos los días ahí, tumbado, mirándola, adoptando su misma postura. Los dos levemente recostados en el diván, ella leyendo y yo intentando leer sus pensamientos. Su belleza alcanza la perfección estética, por eso al ver su imagen encuadrada en la televisión a través de la cámara que hay en su estancia, me abstraigo, y me da la sensación que estoy contemplando  un cuadro de  uno de los mejores pintores del mundo , pero cuando regreso de ese pensamiento, emito una amplia carcajada sonora e hiperbólica, al saber que esa mujer es mía,  tan mía que la he elaborado yo; con unas pocas dosis de odio, desgracias y conocimientos amplios en medicina y cirugía estética. No sé que me gusta más, si observar como un espectador mi obra o el caer en la cuenta de haberla creado yo.  

Es una pesadilla de la que no puedo despertar, es verdad que empezó siendo un sueño, un sueño basado en el dolor, pero éste a medida que avanzaba se convirtió en algo oscuro, despreciable y horroroso. Cada día sufro para que no se escape y cada día sufro por estar enamorándome poco a poco de esta mujer creada artificialmente, su feminidad es la que yo le he enseñado, su piel, sus senos, su sexo…los hice yo a medida.

Pero cuando la observo sin que ella se percate, aquí tumbado, soy momentáneamente feliz, olvido todo el odio que me llevó a hacer lo que hice, me creo mi realidad, que esa mujer es quien veo y que no es otro ser que habita la piel que he creado yo.

viernes, 26 de octubre de 2012

Atentamente : La Queja

El mundo desde que es mundo y floreció el ser, ése que tiene una sensibilidad más allá de los límites conocidos, que padece y disfruta los sucesos que le rodea, y le hacen ser quien es; desde ese mismo momento apareció esa pena o sentimiento que se titula bajo la conjugación de la tercera persona del singular del verbo quejar.

Una idea que está en todos nosotros, incluso en los animales, aunque ellos no la verbalicen cuando se comete una injusticia. Podemos ver cómo desde nuestro nacimiento la llevamos a cabo, y se utiliza sin haber aprendido a formarse como persona dependiente de pensamiento crítico; un recién nacido cuando tiene hambre, frío, calor o incluso por falta de atención, llora; por lo que el llanto es una queja para los bebes, sonora, sin lexemas ni morfemas, pero que llega hasta el alma de quien esté a cargo de esa personita indefensa. Como bien decía antes, los animales también sienten.¿Quién no ha encontrado a su mascota ladrando o maullando porque tiene hambre o porque le duele algo?.

Una vez adquirido el lenguaje, a la única persona a la que nos quejamos por todo, es a nuestra mamá, la cual, no tiene en su mano todas las soluciones para combatir nuestro dolor, por lo que ella nos enseña otra lección; hay que acudir a la fuente, directamente al origen y así, comienzan todas las quejas a esas señoras  y señores que nos transmiten conocimientos en la escuela.

No pretendo hacer una gran lista con todos los ejemplos por los que podemos interponer una queja a lo largo de nuestras vidas, por lo que iré directamente a abordar la cuestión que me ha hecho coger el bolígrafo y ponerme a escribir.
 Hace unas semanas, recebí una carta sin remite ni sello, de color rojo "ira", en la que había unas palabras en el sobre que decían, "Historia de una queja". Dentro apareció un escrito en el cual se presentaba La Queja, ésta, exponía su enfado,  porque cada vez que se le nombraba era sepultada inmediatamente. Exponía una serie de situaciones a las que actualmente estamos acostumbrados y por el mismo hecho en sí de esta carta, no decimos nada. Es bien sabido, que estamos pasando por un momento difícil en España  y los pocos afortunados que van a trabajar cada mañana, cuando conversan con un ciudadano y éste se interesa por el asalariado , escucha -  estoy muy cansado, trabajo muchas horas y mi remuneración es ínfima-  nada más terminar esta frase,  La Queja  que  intentaba introducirse en el ser de su receptor , sólo por mera información, fue aplastada en la acera de la calle, donde tenía lugar dicha conversación entre ciudadanos, mientras que el receptor dice -no te quejes que al menos tienes trabajo...-.  
Nuestra sociedad, la gente del pueblo, ya no se compara con lo mejor, intentando aspirar a escalones más altos, por medio de la queja, sino que tendemos a conformarnos con lo que hay. Así, me cuenta La Queja , que se encuentra en una especie de limbo lexicológico, en el cual no sabe si morirá para siempre, o renacerá y volverá al mundo activo de la conversación.

La carta no termina aquí, continúa dando una serie de ejemplos como éste, que aparecen en el ámbito educativo, sanitario, burocrático…Y así, se ha ideado un gran abanico de respuestas, con el fin de demolerla. El suelo está plagado de quejas aplastadas. Uno se tiene que conformar con lo que tiene y no hay más que hablar.

La Queja muy cómicamente se despide alegando que no se está "quejando de vicio", ya que bastante más se quejaron otros y no tuvieron la misma  suerte que ella, que se ha quedado sola y olvidada.

Llevo días pensando en esta carta y en la razón que tiene; y así he vuelto a utilizar el gran lema que escuchamos desde que tenemos uso de razón, desde que el mundo es mundo. De hecho, lo he colgado de mi balcón para que todo el mundo, cuando mire hacia arriba  buscando un poco de consuelo en el cielo , lo pueda leer.

¡QUIEN NO LLORA NO MAMA!

miércoles, 30 de junio de 2010

El bosque

             El leve aullido del lobo se escuchó e inundó aquel bosque perdido de la mano de "dios", en el  que estaban todas las cabañas de los allí escondidos, destrozadas, quemadas por la furia del viento, ese viento, ese tiempo, aquel, que nunca más volverá. Los Escondidos mantienen ese dulce sabor de café de casa  y esa torrija ocasional, que inundaba todo el bosque de alegría y alborozo, por eso se  lamentan por el desastre, recogiendo las pertenencias a toda prisa, aquellas que no superaran los veinte quilos, o que no ocasionaran muchos viajes en el carro. ¡ Ay pobres!, vivían tan bien en sus pequeñas cabañas, aislados por voluntad, en un mundo en el que la palabra y el corazón era lo más importante, no ese  mundo de fuera que no entendían. Pasaron unos días y tuvieron que salir de sus escondites, el lobo aullaba, buscaba por todos lados un rastro de nuestras cosas, si se encontraba con alguno, jugaba con él, lo observaba...Al fin y al cabo, el bosque era de su propiedad, nosotros debíamos ir a donde iba todo el mundo, en busca de un nuevo bosque en el que estaremos esperando un nuevo aullido, para saltar de nuestras cabañas e ir en busca de otras, hasta dar con el bosque sin fieras, ya que gracias a nuestro conocimiento de todos los bosques, acabaremos dando con el perfecto.
Los Escondidos, volverán a ser anónimos, se irán volando a reponerse y buscar, y en todos ellos quedará algo de aquel bosque tan amado , pasarán los recuerdos en un pensamiento al suspiro y quedarán así, unidos en mente y corazón hasta  que estemos sentados al final de nuestros días en el bosque sin fieras.


Rearme de protones,  explosión, ---- arreglo--- Funcionaré como hasta entonces (¿?)
"Como una herida en el corazón que no me duele"

                 Nunca dejaré de amar el sol que me calentó en un día,
la lluvía que me refrescó la cara
                  esa extendida por siempre mano amiga.

miércoles, 24 de marzo de 2010

Tan lejos

Tan lejos de tí y aun me parece ver tu taza de café con restos en el sálón, tu infinidad de folios esparcidos por doquier, tus pelos por todo el baño, (un día de estos te quedarás calva).

Tan lejos de ti y aun me parece notar en mis pies los tuyos, forzosamente posados, intentando pillar el sueño, una de esas noches en que la conversación se extingue, la televisión no interesa y Elena, sorprendentemente, no tiene nada que decir.

Tan lejos, tan, tan lejos...pero que cerca te siento, no nos hace falta llamarnos, solo una ventana y exalar el humo de la muerte, como hacíamos, eras la única que aceptabas mis exigencias absurdas de salir a la terraza con un frío que pelaba.

Tan lejos de ti y aun me parece escuchar tu risa, esa tan característica, que haría destornillarse a cualquiera.

Vuelve a casa vuelve.....vuelve a tu hogar... Perro tuerto te necesita.

jueves, 11 de marzo de 2010

El plato roto

Un plato roto en mil pedazos, diferentes entre ellos, pero todos con un mismo origen, esparcidos debajo del mueble, de la nevera, en una costura de tu zapatilla…

Ediciones esparcidas por todo el mundo, en un estado y omisión posiblemente diferente o no, libros y libros perdidos, encontrados, únicos, raros… El minucioso trabajo que es ser bibliógrafo. Pequeño y gran amigo que estás con tu pequeña lupa buscando debajo de las mesas y muebles de las bibliotecas, para ti mi más sincera y gran admiración.

jueves, 18 de febrero de 2010

kun-fú

Dicen que llegó a una humilde casa apenas sin aliento, un poco asustado, desnutrido. El ambiente hogareño y la voz áspera del abuelo le hicieron creer que existía una rendija para la felicidad, para vivir en un paraiso compuesto por leña y compañeros para el juego,(Roni y su posterior amiga Lucrecia). Él destacó entre ellos por su simpatía, fidelidad y pelaje, era el gato más brillante que he visto en mi vida. "Un señor" se lo llevó, esperemos que a un mundo paralelo en el que pueda vivir como hasta entonces. Ójala conozca un buen día a uno como tú.

miércoles, 17 de febrero de 2010

Pozo oscuro

Maldigo a las chuches que tan feliz me hacen,

maldigo esos ratos muertos que propician a comer, y comer dulce,

maldigo mi falta de higiene dental que apareció a los 10 años.

Dientes tristes perdidos entre caries y sarro….

Si se iban a ir algún día, habría preferido quedarme como estaba al nacer, desdentada, así al menos, podría haber aprendido a comer y a ver la belleza de un pozo oscuro.

Pero no, la sociedad y las clínicas dentales se empeñan en hacer un canon de humano, el cual, permanece con todos sus dientes hasta que llega a la tercera edad, la cual, no posee cánones, sólo a Jaime Cantizano como “el hombre ideal”.

En fin, todo esto venía porque hace aproximadamente 7 años mataron a una de mis muelas, aquellos que se hacen llamar dentistas, y tan solo me dejaron un recuerdo de ella, una sombra de lo que fue, y en su lugar pusieron un armatoste de la más bella ingeniería, una muela de porcelana. Parecía que todo iba bien, hasta que un día se despegó, mascando esas chuches del infierno. La pegaron, se despegó, la pegaron, se despegó… ¡estoy harta! En vez de pegármela tomaré una solución propia…pienso anudármela a los demás compañeros suyos. Acabaré yendo al dentista para que me la vuelvan a pegar, para que no se acabe el mundo en ese continuo devenir de las cosas.

¡Niños, lavaos los dientes!